La tendencia de make up que dio qué hablar durante el 2015, ahora también desembarca en el cabello.
Es muy fácil: la idea es iluminar aquellas zonas del rostro a destacar y oscurecer aquellas que queremos ocultar para enfatizar una mejor expresión.
Para llevarlo a cabo, la clave es ir por jugar con los tonos en la coloración del cabello. Para ello, te mostramos qué camino tomar según el rostro que tengas:
1- Redondo: Hay que destacar la línea recta del cabello y oscurecer alrededor de las orejas y las puntas.
2- Ovalado: Para ganar volumen, hay que ir por tonalidades que den profundidad. Para ello, hay que jugar con varios tonos dentro de la misma gama de colores.
3- Alargado: Es necesario oscurecer las raíces y destacar con algunas mechas más claras en las partes inferiores del cabello para ampliar un poco la parte inferior del rostro.
4- Cuadrado: Para suavizar los rasgos duros, hay que ir por los tonos claros como los duraznos y mieles.
5- Corazón: Balancear el rostro con luces alrededor de la boca y tonos más oscuros en la raíz.